Las reflexiones de Galileo tienen lugar en el interior de un gigantesco monocular, escenográficamente evocado por un hemiciclo creado con un Telón de cruce hecho de bandas de LBE - Perolastic que separa el mundo del astrónomo pisano del exterior.
Una membrana sólo permeable al paso de cuatro mujeres: la madre de Galileo, Giulia Ammannati, su hija Virginia, al orden Sor Maria Celeste, el amante Marina Gamba, madre de Virginia y la gobernanta que le quedará cerca hasta al final.
Texto, dirección, escenografía
Daniela Nicosia
Con
Solimano Pontarollo y Piera Ardessi
Consultoría musical
Paolo Da Col
Iluminación, sonido
Paolo Pellicciari
Escenotécnico
Luigino Marchetti
Construcción objetos de escena
Luigi Bortot
Realización vestuario
Atelier Raptus & Rose
Producción
Tib Teatro en colaboración con Università degli Studi di Padova-Dipartimento di Astronomia y Fondazione Teatri delle Dolomiti